Argentine-British: Pilotos argentinos y británicos unidos en la Segunda Guerra Mundial, por la Lic. Andrea Manfredi
 
Cuando se habla de la Fuerza Aérea en nuestro país, inmediatamente se hace mención a los heroicos pilotos argentinos que con sus Skyhawk A4B y A4C, sus Mirages V Dagger, Mirage IIIE y Pucará IA-58, llevaron a cabo increíbles misiones de ataque, hundiendo y averiando importantes unidades navales británicas como los destructores HMS Sheffield, HMS Coventry, las fragatas HMS Antelope y Ardent; y el portacontenedores Atlantic Conveyor, entre otros, escribiendo para la historia de la aviación nacional, y también mundial, uno de los capítulos más interesantes que hasta el mismo as de la aviación francesa, Pierre Clostermann, elogió en una conceptuosa carta enviada al titular de la Fuerza Aérea Argentina (FAA), Basilio Lami Dozo. Además del agregado aeronáutico norteamericano en Buenos Aires, Robert T. Pitt, veterano de Vietnam, quien obsequió a la Fuerza Aérea su Corazón Púrpura, condecoración que se le otorga al herido en combate; el almirante John Woodward y la mismísima Margaret Thatcher. Todos ellos con palabras de admiración a aquellos hombres.

Sin embargo, las acciones de nuestros compatriotas por los aires se remontan tiempo atrás. No olvidemos en la década del 70 el denominado Operativo Independencia en la Guerra de Tucumán con la guerrilla armada, o aquel 16 de junio de 1955, en donde pilotos de la Aviación Naval, bombardearon Plaza de Mayo y otros puntos claves de nuestro país para ponerle fin a la vida del general Perón.

Pero existe también otro capítulo que de seguro resultará interesante a los ojos del lector: el de la presencia de más de 800 argentinos en la Real Air Force británica, conocida como la RAF, y la Real Fuerza Aérea Canadiense, la RCAF, los cuales combatieron bajo la bandera aliada durante la Segunda Guerra Mundial. Estos se agrupaban bajo el nombre Firmes Volamos, integrando el escuadrón 164 “Argentine-British”, financiado por donaciones enviadas desde nuestro país ya que gran parte de ellos procedían de familias inglesas y francesas. En su mayoría, se trataba de deportistas, en especial, del ambiente del rugby, aunque también se inscribieron muchos ferroviarios y empleados de la fábrica británica Alpargatas. Un dato curioso resulta el hecho de que todos los integrantes de los primeros Pumas, selección nacional de rugby, entraron en combate. Para distinguirse, pintaban en las narices de sus aviones caza, Spitfire, Hurricane y Mosquitos, y en sus bombarderos y aviones de transporte Lancester y Stirling, gauchos de Florencio Molina Campos y al mismísimo Patoruzú.

Entre la lista de voluntarios se encontraba un Newbery; un tío de Alfonsín por parte de la madre; Bernardo Foulkes, capitán de la RAF, y Ricardo Moreno, sobrino del perito Francisco P. Moreno, formando parte del grupo de más de 4000 voluntarios que lucharon en el ejército y marina aliados, muchos de ellos realizando grandes hazañas como aquella de Kent Charney, argentino de origen inglés, quien el 4 de julio de 1944, derribó con su SP MKIXB (LO-B) un avión alemán sobre Normandía, escoltando nada menos que al as francés, Pierre Clostermann.

Es sabido que participaron no solo en el Día D, realizando más que nada misiones de espionaje, sino también en la Batalla de Inglaterra, en Alemania, en Francia y en el Canal de la Mancha. Es más, existen muchos testimonios que aseguran la rapidez con que cumplían su período de adiestramiento y accedían a puestos de jerarquía en los entrenamientos en Canadá.

De estos intrépidos personajes se conoce que 140 perecieron en combate, 9 fueron tomados prisioneros y 56 fueron condecorados, luciendo sus insignias junto a aquella que decía claramente ARGENTINA.

Aunque nuestro gobierno mantuvo una actitud neutral frente al conflicto bélico hasta enero del 44, existieron valerosos hombres que dieron sus vidas por una causa, en este caso, la causa aliada, engrandeciendo el capítulo de nuestra Fuerza Aérea. ¡No olvidar!

Fuentes

- <Aviación argentina.net>.

- Claudio Gustavo Meunier, Nacidos con honor, Buenos Aires, Grupo Abierto, 2007.

- “Argentinos en la RAF”, de Ricardo Marín, La Nación, 31 de julio de 2011.